Puedes llegar por varios caminos al mismo destino…



Elegir carrera es complicado. A veces no sabemos a qué nos queremos dedicar, o por dónde empezar. Queriendo ser traductor@, lo más obvio sería hacer una carrera de traducción e interpretación o una de filología, pero muchos traductores ni siquiera son de letras. Yo te voy a contar mi experiencia.

Traducción e Interpretación (la mayoría de mis compañeras del máster de TAV han hecho esta carrera)

vs.

Estudios Ingleses o Filología

Cuando me empecé en el máster de TAV de la UE de Valencia, pensé que iba a estar muy perdida y retrasada con respecto a mis compañeras que hubieran estudiado traducción e interpretación. Sin embargo, muchas de las cosas que estudié en la carrera me han dado los conocimientos necesarios para algunos aspectos de la TAV. Por ejemplo:

La asignatura de Fonética y fonología me ha resultado útil para el ajuste de los doblajes. Como ya comenté hace poco en una entrada de mi blog, en doblaje hay que tener en cuenta lo que se llama “sincronía labial”. Es decir, que los movimientos de los labios de la versión original coincidan todo lo posible con los que se necesitarían al pronunciar la traducción para doblaje. 

La de Comentario de textos audiovisuales me ha resultado útil para la audiodescripción, para saber, por ejemplo, cuándo hay que describir las expresiones faciales de los personajes en pantalla. Esto lo explicaré más adelante en una entrada que haga sobre audiodescripción.

Estuve de Erasmus en Norwich cuatro meses, desde septiembre hasta diciembre de 2022. Elegí la Universidad de East Anglia porque tenía muchas asignaturas de lingüística y traducción. Casi me muero con una asignatura de traducción francés a inglés, pero valió la pena porque dediqué esos cuatro meses a leer y aprender todo lo que pude sobre traducción audiovisual. Creo que me leí la mitad de los libros que había en la biblioteca sobre traducción y lingüística (tenían casi una planta entera dedicada a eso).

Aquí tenéis una foto de todos los libros que me leí en una tarde:

Por último, no me gusta ni se me da bien enrollarme y mis profesores siempre me lo han echado en cara, desde la ESO hasta 4º de carrera (muchas veces me pedían ocho carillas y yo no era capaz de escribir más de dos y media). Sin embargo, sí que se me da bien reducir información y eso me ha venido bien para la subtitulación convencional, y sobre todo para la subtitulación para sordos (que tiene restricciones aún más estrictas).

En conclusión, elijas la carrera que elijas, que sea algo que te guste o se te dé bien (y si pueden ser ambas cosas, mejor). No hagas lo que la gente te recomiende simplemente porque sea el camino más obvio, porque puedes llegar por varios caminos al mismo destino.

Y tú, ¿qué carrera hiciste para convertirte en traductor@? Déjame tu respuesta en los comentarios.

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